Hace meses que no atiendo el blog, con estos calores no apetece meterse en la cocina. Aunque si que cómenos, pues estamos de buen año, pero cositas más ligeras y eso si.... cerveza, tinto de verano, gin tonic etc... yo creo que de aquí nos vienen los kilitos que hemos cogido toda la familia.
Bueno estos días hemos estado en Galicia y mi suegra me regaló como un kilo de zorza (carne de lomo de cerdo en trocitos y con un adobo), todo un manjar. Allí es típico utilizarlo para el relleno de empanadas y empanadillas, y con este fin me lo traje. Ayer me puse manos a la masa, nunca mejor dicho, quedo muy rica pero para mi gusto un poco seca, ya se sabe que el lomo es una carne seca y yo creo que la pase demasiado y encima le quite todo el aceite sobrante, pero el resultado fue bastante satisfactorio.
Para la masa
50 gr. de agua
50 gr. de aceite de oliva virgen extra
50 gr. de vino blanco
90 gr. de manteca de cerdo o de mantequilla (yo manteca de cerdo)
1 huevo
25 gr. de levadura prensada fresca
450 gr. de harina de fuerza aproximadamente
1 cucharadita e sal
1 huevo para pintar
Para el relleno
1 kg. apróx. de zorza
200 gr. de cebolla
1 pimiento rojo
-Yo he empezado con el relleno, he puesto aceite en una sartén y he pasado la carne, mientras en otra sartén he sofrito la cebolla y el pimiento cortado en juliana. Dejar enfriar.
- Empezamos con la masa: Verter todos los ingredientes en el vaso excepto el huevo, la levadura, la harina y la sal. Programa 1 minuto a 37 grados y velocidad 2. Añade el huevo y la levadura y mezcla 5 segundos en velocidad 4.
-Incorpora la harina y la sal y mezcla 15 segundos, velocidad 6 y a continuación programe 2 minutos, vaso cerrado, velocidad espiga.
-Divide la masa en dos. Estírala muy fina con un rodillos (yo lo hago dentro de una bolsa de plástico para que no se me pegue y me resulte más fácil), y forramos un molde. Rellenamos, cubrimos con la otra mitad de la masa, sellamos bien los bordes, pintamos la superficie con huevo batido y lo introducimos en el horno durante 30 minutos a 200 grados.
Acompañada de unos pimientos de padrón y de un buen vino gallego, resulto ser un bocado gratificante.
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